La tecnología, en sus más variadas formas y aplicaciones, está en constante evolución. Siguiendo este movimiento, los algoritmos de búsqueda cambian con frecuencia, adaptándose a las exigencias de las nuevas herramientas. Es en este escenario donde nace el concepto de SXO, acrónimo de Search Experience Optimization, que se traduce en una “unión” de las técnicas SEO con la UX (experiencia de usuario), lo que implica la búsqueda permanente de una experiencia web orgánica, fluida e intuitiva.
A pesar de ser un tema discutido desde mediados de 2015, el SXO ha ganado aún más protagonismo en medio de la aceleración digital intensificada por la pandemia y el aislamiento social. Una reciente actualización del algoritmo de búsqueda de Google también ha contribuido a poner el tema aún más en boga en el mercado, así como otra tendencia creciente: Customer Centric. En la práctica, esto significa centralizar toda la planificación estratégica en la experiencia del cliente, con el objetivo de aumentar la tasa de fidelidad y conseguir así mejores resultados.
SXO también pretende combatir un punto que afecta negativamente a la eficacia del SEO, la tan temida tasa de rebote. Un porcentaje indeseable de usuarios abandona un sitio web a los pocos segundos de acceder a él, lo que demuestra que la página era poco atractiva y poco interesante para quienes la buscaban. En otras palabras, a causa de una mala experiencia, en cuestión de segundos, los usuarios podrían abandonar la página de una determinada marca y se irán a otra, minando todo el trabajo de SEO.
La importancia de la experiencia
Un estudio realizado por Jakob Nielsen, experto en Experiencia de Usuario, indicó que la mayoría de los usuarios abandonan un sitio web en los primeros diez segundos. Por lo tanto, es esencial dar la respuesta que el consumidor necesita en este corto espacio de tiempo.
Otra encuesta de Google Trends reveló que el 72% de los consumidores cree que el servicio personalizado es crucial para el proceso de compra. La prioridad ya no es el mecanismo, sino la experiencia. A partir de estos datos, es fundamental que los equipos de cualquier empresa se centran siempre en el usuario, haciéndole fácil e intuitivo encontrar la información que busca. En lugar de optimizar para los motores de búsqueda, la misión de SXO es mejorar la experiencia del usuario. En la práctica, se centra en el cliente.
Google ofrece tres tipos de búsqueda: de contenido, de servicio o de producto. Hay que tener en cuenta este sistema a la hora de preparar el camino a seguir en el SEO, considerando siempre la dinámica específica de cada categoría. Por ejemplo, cuando busco la mejor zapatilla para correr, he demostrado interés en comprar una zapatilla, pero en ese momento quiero consumir contenido. El resultado de la búsqueda que se muestra tiene que estar relacionado con el contenido, que debe estar vinculado a algunas vías de venta del producto. Esta es una de las pistas del SXO.
La gente de todo el mundo ha dirigido su atención y su gasto a los canales digitales, y esto supone una oportunidad para que las organizaciones capten el interés de los compradores que están abiertos a explorar opciones nuevas y diferentes. Lo más importante es que la guinda del pastel ya no es simplemente conseguir tráfico. La idea, de un tiempo a esta parte, es ofrecer algo mucho más gratificante y motivador, con beneficios para las empresas en términos de negocio y notoriedad.
Trabajar con SEO trae buenos números y crecimiento de tráfico en el sitio, ya que SXO propone la atracción de tráfico calificado y más que buenas métricas: ¡conversiones! Al final del día, el cliente quiere resultados en ventas o clientes potenciales, por lo que SXO interviene para facilitar este viaje para el consumidor final.
Por dónde comenzar…
La recomendación es invertir en una buena experiencia de usuario dentro del sitio y producir contenido relevante. Tener contenido que responda a todas las búsquedas es esencial. Además, ¡concéntrate en vincular! Necesitas dirigir todo el recorrido del usuario dentro del sitio, es decir: si ingresó a través del blog necesitas llevarlo al comercio electrónico, si ingresó a través del comercio electrónico, ¿cuál fue el término utilizado? ¿El contenido del interior incluye las principales dudas? Todo esto necesita ser analizado. SXO es más que “cómo se realiza la búsqueda”, sino también cómo convertir esa búsqueda en una venta y garantizar una buena experiencia de usuario.