¿Conoce una marca que es tan conocida como para convertirse en sinónimo de toda una categoría de productos? Este es el sueño de toda empresa, y una de las razones por las que esto es posible es por la estrategia de Branding bien estructurada.
Si bien asociamos el marketing como un método para atraer personas y aumentar las ventas directamente, es importante recordar que existen formas más sutiles y efectivas de hacer esto. El Branding es el ejemplo perfecto.
Empresas muy similares entre sí pueden tener resultados muy diferentes simplemente porque una invierte en la gestión de marca y la otra no.
El branding es el conjunto de acciones alineadas con el posicionamiento, propósito y valores de la marca. El objetivo es despertar sensaciones y crear conexiones conscientes e inconscientes, que serán cruciales para que el cliente elija su marca a la hora de decidir si compra el producto o servicio.
La decisiones de compra son emocionales
Nos gusta pensar que tomamos decisiones de forma racional, que nuestros instintos e impulsos no tienen tiempo a la hora de lidiar con el dinero, pero no siempre es así de sencillo.
Hay una serie de factores que nos afectan de forma inconsciente en el momento de la compra. Los desencadenantes mentales son prueba de ello. Una buena frase, colocada en el lugar correcto en el momento adecuado, puede marcar una gran diferencia en las ventas.
Otro ejemplo de la facilidad con que nuestras decisiones se ven afectadas por factores externos es el marketing de experiencias. Marcas como Nike preparan sus tiendas para afectar múltiples sentidos y estimular un aumento de las compras impulsivas.
Incluso si los productos son de calidad similar, las marcas fuertes y reconocidas son las que tienen la mayor ventaja a la hora de tomar una decisión de compra.
El branding aumenta la percepción de valor
¿Cuántas veces ha pagado más por un producto de una marca conocida para asegurarse de no recibir algo de calidad inferior? Esto es muy común en los sectores más diversos, e ilustra bien cómo cambia la percepción de valor según el reconocimiento de la marca.
Tomemos, por ejemplo, los productos de Apple. En muchos casos, sus especificaciones técnicas son inferiores a las de sus principales competidores, su precio es mucho más elevado y existen ciertas limitaciones de compatibilidad con dispositivos de otras marcas.
Sin embargo, la empresa ha sido una de las empresas más valiosas del mundo durante varios años, y lidera no solo en ventas, sino en el desarrollo de nuevos productos, siendo seguida por el resto del mercado.
La lección es clara: cuando la marca es fuerte, las personas están dispuestas a pagar más por productos y servicios, ya que comienzan a ver un mayor valor en ellos.
La fuerza de la marca se mantiene con el tiempo
Uno de los factores que más debería entusiasmarle en Branding es su longevidad. Una estrategia bien planificada y ejecutada puede tener un efecto durante mucho tiempo y producir buenos resultados directa o indirectamente. Algunos de ellos incluyen:
- aumento de las ventas directas;
- reducción del costo de adquisición;
- mayor retención de clientes;
- capacidad para atraer y retener talento para la empresa y entre otros.
Piense también en cómo una empresa cuya marca es sólida logra hacer frente a una situación de crisis en el sector. Es mucho más favorable posicionarse estratégicamente para lanzar nuevos productos, apostar en diferentes mercados u obtener crédito para expandirse.
Las prácticas para aplicar el Branding a su negocio
Una buena estrategia tiene el potencial de transformar tu negocio para siempre.
1. Comprender cuáles son los valores de la empresa
Los valores de marca representan el mensaje que se debe transmitir al público en cada acción, grande o pequeña, y también cómo la marca quiere ser vista.
Si los involucrados en la estrategia de Branding no tienen estos valores claramente definidos, toda comunicación será inconsistente y artificial, lo que genera desconfianza.
Por otro lado, cuando todos entiendan cuál es la “personalidad” de la marca y cómo mostrarla de manera práctica, los valores se transmitirán de forma natural, y tu persona se identificará con ellos rápidamente.
2. No abandones el DNA de la marca
Independientemente del canal que se utilice, las acciones de Branding siempre deben mantener un estándar que sea fácilmente reconocido por el público. Este es el DNA de la marca.
Piense en una persona que en cada momento tiene diferentes ideas sobre un mismo tema, habla con diferentes acentos y presenta cambios de humor. Difícilmente generará confianza en quienes te rodean.
Asimismo, si en cada acción de Branding la empresa adopta una actitud diferente, ya sea en la forma de comunicar, en la propuesta o en los valores que se defenderán, nadie identificará la propuesta real de la marca.
3. No pienses solo en “ahora”
No bases todas sus acciones de Branding en los resultados que obtendrás a corto plazo. No es así como funciona.
Por supuesto, algunas iniciativas resultarán relevantes en poco tiempo, pero otras requieren un poco más de paciencia. Pensar en el futuro es lo que contribuirá a las acciones más impactantes.
Si no lo crees, puedes pensar en algunas de las marcas más valiosas del mundo, como Nike, Apple y Coca-Cola. Sus principales acciones de Branding no tenían como principal objetivo resultados inmediatos, pero generaron miles de millones en ganancias durante años después de su realización.
4. Valora la construcción de la cultura empresarial
¿Qué tiene que ver la construcción de una cultura sólida, que se relacione con los valores de la marca, con la forma en que el público la ve? En una palabra, ¡TODO!
Pero expliquemos con más detalle: los empleados son los encargados de transmitir el mensaje de una marca. ¿Cómo harán esto de manera efectiva si no creen en el mensaje en sí?
Si la empresa no tiene una cultura interna que coincida con su mensaje, puede que incluso pueda fingir por un tiempo, pero a la primera señal de crisis todos sabrán que la situación real es diferente.
5. Invertir en la producción de contenido
El marketing de contenidos ya ha demostrado ser una de las principales herramientas de Branding que existen. Pocas cosas tienen un poder tan grande para involucrar y motivar a las personas como una historia bien contada.
Entonces, producir contenido relevante e interesante para tu audiencia, sin preocuparte demasiado por vender, marcará la diferencia para posicionar tu marca como una autoridad en tu nicho de mercado y establecer la confianza necesaria en el momento adecuado para ofrecer un producto.
Trabajar en la gestión de su marca puede no parecer algo tan importante en este momento, especialmente si todo va bien. Pero créanme, dejar de lado la marca puede costar mucho tiempo y dinero, especialmente a largo plazo. Por otro lado, si sigues los consejos que viste aquí, cosecharás excelentes frutos durante mucho tiempo.